“El Patón nos enseñó a nunca creernos mas que nadie" (ENTREVISTA)
A 12 años de la Hazaña, Patricio Urrutia confesó qué hizo Bauza para ganar la Libertadores con LDU
Patricio Urrutia, histórico Capitán de Liga Deportiva Universitaria, confesó qué hizo Edgardo Bauza puertas adentro de la banda de los Centrales, para que rompieran la historia 12 años atrás al ganar la primera y única Copa Libertadores del fútbol ecuatoriano.
Entrevistado este jueves por radio Área Deportiva (99.3 FM), en un día emblemático para todos quienes forman parte de Liga Deportiva Universitaria al cumplirse 12 años de la Final de Ida de la Copa Libertadores 2008, en la que el Rey de Copas de Ecuador superó por 4 a 2 a Fluminense en el estadio Rodrigo Paz, Patricio Urrutia valoró lo que vivieron en esa temporada inolvidable, ponderando las enseñanzas que les dejó Edgardo Bauza.
“Recordar un partido tan importante para Liga, el fútbol ecuatoriano y para nosotros como jugadores también. Tener tres goles de ventaja te hacía favorito y te ponía a soñar (cuando iban ganando 4x1), pero como jugadores, siempre teníamos los pies sobre la tierra y sabíamos que la final no terminaba ahí, sino en Brasil. Salimos al 2T, no mantuvimos el mismo ritmo que en el 1T y Fluminense se encontró con ese segundo gol (el 4x2)”, acotó el histórico Capitán de la U.
“Confiábamos que una ventaja de dos goles, más allá del sin sabor de haber perdido una ventaja de tres goles (en Ponceano), confiábamos en que allá (en el Maracaná) iba a ser mano a mano, que el equipo tenía con que jugar esa Final. La consigna era buscar a los jugadores de ataque, buscar al Piojo (Damián), (Joffre) Guerrón y el Chucho (Benítez) estaban por las bandas, y Claudio (Bieler) estaba prendido adelante”, complementó.
“Normalmente no se ven tantos goles en una Final de Libertadores (LDU ganó 4x2 en la ida y cayó 3x1 en la vuelta para ser Campeón en penales). El Patón (Edgardo Bauza) fue fundamental, un pilar muy importante, un tipo que nos dio confianza, que fue sacando a cada jugador lo mejor. En el 2007, Joffre salía puteado y el Patón en patrullero. Y él, convencido de lo que tenía, seguía manteniendo a Joffre como titular. Nos enseñó a nunca creernos más que nadie y a tener la convicción de que cuando queríamos jugar, éramos un equipo complicado para cualquiera”, sentenció Urrutia.